Desde el ecosistema emprendedor cada día se da mayor interés no sólo a qué los emprendedores son reactivadores de las economías domésticas y que la suma de ello se impregna en el gran impacto socio/económico, también de qué forma se representan en indicadores de desarrollo sustentable, es por esto que en su planificación inicial, con estrategias formales llevadas a cabo, se miden impactos y su acceso a la inversión.
Algunos datos relevantes del contexto son;
La Visión y misión del emprendimiento (como conjunto de valores del emprendimiento), los objetivos concretos, el qué?, el cuánto? Y el quién? Como herramientas de dimensiones de impacto. Es decir, cuáles son los efectos positivos y negativos, experimentados por las personas y el ambiente con las acciones emprendedoras dadas.
Se tienen en cuenta variables como los insumos, actividades, productos, resultados o consecuencias e impactos resultantes.
Esto nos llevará a definir estrategias ambientales y sociales en los emprendedores, viendo comportamientos y ubicarlos en el mejor sentido para el bienestar general.
Estas situaciones tienen que ver con las buenas prácticas laborales, el clima del contexto interno del emprendimiento, las capacitaciones de las personas, el desempeño en el emprendimiento. Todo esto ronda las políticas llevadas a cabo a cumplimentar, incorporar normativas e implicancias del ámbito laboral y planes de capacitaciones/clima laboral.
Como es de fácil entendimiento, los emprendimientos inciden directamente en el bienestar de las comunidades, donde interactúan, se relacionan y tiene valor agregado. La dimensión social es situada en la sustentabilidad de las diferentes actividades, de esta forma contribuyendo al desarrollo y la creación de valor, generando oportunidades y fortaleciendo las múltiples influencias (Ejemplo de esto son los proveedores, acreedores, actores sociales). Esto nos refleja el interés de desarrollos responsables, que generan confianza, intercambio de experiencias y el mejoramiento de emprendedores continuamente. Hoy debemos pensar en los beneficios del impacto del emprendimiento en sus oportunidades dentro de la organización, es decir, poder evaluar resultados, identificar su funcionamiento y eficiencia de sus recursos, comunicación de logro de desempeño y resultados con los recursos humanos. Y lo que es en el contexto externo, es tener claro mis clientes, su sensibilización y fidelidad de compra, las inversiones y sus líneas que nos permitan reducir los riesgos, ofreciéndonos aumentar la visibilidad de financiamiento.
Esto nos servirá no solo para presentar datos actualizados, llevar el control y seguimiento, también a realizar investigaciones propicias y eficientes para apoyar aún más nuestro emprendimiento y sus características relevantes. La información es valor agregado y acelera y comprende nuestro accionar diario, la utilización de estrategias y el diseño de posibilidades en un futuro, aumenta nuestra capitalización de intereses y mejora nuestra visión.

