Autora: Yanina Morienega

¿Qué es la violencia por motivos de género? 

La violencia por motivos de género es una práctica estructural que viola los derechos humanos y las libertades fundamentales. La violencia por motivos de género afecta gravemente a mujeres y personas LGBTI+. Se produce cuando sufren algún tipo de discriminación, agresión, hostigamiento o degradación por su identidad de género, expresión de género u orientación sexual.

¿Qué es la violencia contra las mujeres y personas LGBTI+?

Violencia contra las mujeres y personas LGBTI+ es cualquier conducta (una acción, un insulto, una actitud, un silencio o una falta de colaboración) que produzca un daño a la persona por el solo hecho de ser mujer o persona LGBTI+. No se trata solo de agresiones físicas. Nada justifica el ejercicio de la violencia. La víctima nunca es culpable de la violencia que recibe. Existe un ley 26485 de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres, como así también contamos con una gran variedades centros de protección en diferentes provincias en nuestro país. La violencia de género afecta distintos aspectos de la víctima como: su vida, su libertad, su dignidad, su integridad física, psicológica o sexual, su situación económica, su seguridad. Su acceso al trabajo, a la educación y a la atención médica.

¿En qué ámbitos ocurre la violencia contra las mujeres y personas LGBTI+? 

La violencia puede ocurrir en cualquier espacio público o privado.

  • Violencia doméstica Es la ejercida por cualquier integrante del grupo familiar de la mujer o persona LGBTI+ –en la mayoría de los casos, la pareja o expareja–, independientemente del espacio físico donde se desarrolle. La violencia doméstica afecta a todas las personas que integran la familia.
  • Violencia institucional Es la ejercida por funcionarios o funcionarias, profesionales, personas que integran fuerzas de seguridad y personal perteneciente a cualquier órgano, ente o institución pública, que obstaculizan o impiden que las mujeres y personas LGBTI+ accedan a políticas públicas y ejerzan sus derechos.

 

  • Violencia laboral Es la discriminación contra las mujeres y personas LGBTI+ en los ámbitos de trabajo públicos o privados, que pone obstáculos a su acceso, ascenso o permanencia en el empleo.
  • Violencia contra la libertad reproductiva Es la que vulnera el derecho de las mujeres y personas con capacidad de gestar a decidir libre y responsablemente cuántos embarazos quieren tener o cuánto tiempo quieren esperar para tener más hijas o hijos.
  • Violencia obstétrica Es la que ejerce el personal de salud sobre el cuerpo y los procesos reproductivos de las mujeres y personas con capacidad de gestar.
  • Violencia mediática Es la publicación o difusión de mensajes e imágenes que denigran a las mujeres y personas LGBTI+, y atentan contra su dignidad en cualquier medio masivo de comunicación y redes sociales.
  • Violencia en el espacio público (“acoso callejero”) Es la violencia ejercida contra las mujeres y personas LGBTI+ en lugares públicos o de acceso público, como los medios de transporte o centros comerciales.
  • Violencia pública-política Es la que impide o limita el desarrollo propio de la vida política o el acceso a derechos y deberes políticos de las mujeres y personas LGBTI+ por medio de intimidación, hostigamiento, deshonra, descrédito, persecución, acoso o amenazas.
  • (El término pareja incluye al novio o la novia, al conviviente o la conviviente, al esposo o la esposa, al exesposo o la exesposa, etc.)
  • ¿Qué tipos de violencia contra las mujeres y personas LGBTI+ existen?
  • La violencia contra las mujeres y personas LGBTI+ se puede ejercer de distintas maneras. La ley las protege en todos los casos.
  • -Violencia física Son las agresiones contra los cuerpos de las mujeres y las personas LGBTI+. Hay violencia física cuando las golpean, obligan a consumir drogas o alcohol, les tiran cosas.
  • -Violencia psicológica Son las agresiones que producen un daño emocional, bajan la autoestima y afectan la salud psicológica de las mujeres y personas LGBTI+. Hay violencia psicológica cuando: controlan lo que hacen o deciden sobre sus vidas, las celan, las alejan de sus familias y amistades, las amenazan, las insultan. La violencia psicológica puede generar un daño duradero o permanente en la persona víctima, aun cuando no es tan fácil identificar como la violencia física.
  • -Violencia sexual Sucede cuando a las mujeres y personas LGBTI+ no las dejan elegir si quieren o no tener relaciones sexuales, o la manera en la que quieren tener un contacto sexual. Hay violencia sexual cuando: las violan, las acosan, las manosean, las obligan a tener contactos sexuales de cualquier tipo, no respetan su decisión de usar métodos anticonceptivos en la relación sexual.
  • -Violencia económica Sucede cuando la pareja o la expareja de la mujer o persona LGBTI+, por acción o falta de acción, daña sus bienes, ingresos o economía. Hay violencia económica cuando: les prohíben trabajar, las amenazan con echarlas de su casa, les manejan la plata que ganan con su trabajo, no les pagan la cuota de alimentos para sus hijas e hijos, las obligan a tomar decisiones económicas que no quieren, por ejemplo, firmar solicitudes de préstamos, les ocultan ingresos económicos del hogar y las excluyen de la planificación económica.
  • -Violencia simbólica Son todos los signos, imágenes, mensajes e ideas que muestran a las mujeres y personas LGBTI+ en una situación de inferioridad con relación a los hombres y, por eso, contribuyen al trato desigual de las mujeres y personas LGBTI+ y a su discriminación. Por ejemplo, las publicidades que ponen a la mujer como única responsable del cuidado de la casa, de las hijas e hijos, o de la limpieza.
  • -Femicidio, transfemicidio y travesticidio El Femicidio es la forma más extrema de violencia contra la mujer. Abarca los delitos cometidos por varones que terminan con la muerte de mujeres por motivos de género. Para la ley argentina, el Femicidio, el transfemicidio y el travesticidio son crímenes de odio cometidos hacia cuerpos feminizados por motivos de género.

-Micromachismos Son maniobras sutiles, y muchas veces imperceptibles, de ejercicio del poder en la vida cotidiana, que atentan en diversos grados contra la autonomía y el empoderamiento de las mujeres y personas LGBTI+. Por ejemplo, decirle a la mujer o persona LGBTI+ que no haga ciertas cosas o excluirlas de la posibilidad de hacerlas por motivo de su género.

¿Cuáles son los derechos de una persona que sufre violencia por motivos de género? 

Los derechos son: 

  • Recibir atención en centros de salud y asistencia social, ser escuchada y a que tu opinión sea tenida en cuenta.
  • Recibir protección judicial urgente, preventiva y gratuita, cambiar tu lugar y horario de trabajo, hacer la denuncia en cualquier comisaría o unidad judicial cercana a tu domicilio.
  • Recibir respuesta oportuna y efectiva por parte del Estado y organismos competentes, recibir un buen trato y no ser re victimizada, pedir que se respete tu intimidad.
  • Recibir asesoramiento y acompañamiento de una abogada o abogado.
  • Recibir apoyo económico y acompañamiento integral por parte del Estado para que puedas encarar un proyecto de vida autónomo y libre de violencia.
  • Exigir que se respeten tus prácticas y manifestaciones emocionales, afectivas y sexuales, ya sea hacia personas del mismo género, de distinto género o ambos, expresar tu identidad de género auto percibida y adoptada, y ser tratada y nombrada de esa forma.

 

¿Qué se puede hacer en casos de violencia por motivos de género? 

Si sufrís violencia por ser mujer o LGBTI+, o conoces a alguien que la sufra, tenes derechos a recibir ayuda y asesoramiento. Podes: 

 Llamar a la línea 144 del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad o a la línea 137 del Programa Las Víctimas contra las Violencias del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos; o Acercarte a: centros comunitarios de atención integral a la violencia, oficinas de atención integral de la violencia de género, centros de asistencia a víctimas de delitos contra la integridad sexual, dispositivos de alojamiento, recuperación y atención, hogares de protección integral, oficinas de atención a víctimas de violencia de género de la Defensoría General de la Nación, Centros de Acceso a la Justicia (CAJ) más próximos, cualquier hospital, en caso de estar herida o haber sufrido una violación. 

 En caso de estar herida o haber sufrido una violación, acércate a un hospital o a un centro de salud para que las médicas o los médicos que te atiendan den fe del hecho y te asesoren, en caso de que decidas hacer la denuncia pertinente. En la guardia te tienen que atender de manera inmediata, respetar tu privacidad, escucharte e informarte sobre los pasos a seguir. Podes elegir que te atienda una profesional mujer o un profesional hombre. El personal de salud no puede: tomar decisiones sin tu consentimiento, exigir que hagas la denuncia para brindarte la atención necesaria. 

 En caso de haber sufrido una situación de discriminación, contáctate con el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI): llama a la línea 168, acércate a cualquiera de sus delegaciones en todo el país, escribí a: diversidadsexual@inadi.gob.ar Evita contactarte con la persona agresora. 

No todos los casos de violencia son iguales, por eso el asesoramiento que ofrezcan debe respetar la situación de cada uno y buscar la mejor respuesta. Los pasos a seguir dependen del lugar donde resida la víctima. Las provincias tienen estructuras distintas y diferentes lugares disponibles a los que recurrir. 

 

Las líneas de ayuda para las víctimas son muchas, en cambio los castigos para los victimarios son cada vez menores y leves. Creo que en conclusión el problema no reside en ayudar cada día mejor a una víctima, sino en ocuparse del causante principal castigándolo de modo que no vuelva a suceder. 

En efecto, el estado es un participante de los hechos y futuros sucesos, que marca la escena con un papel crucial en la problemática, destacando una responsabilidad social casi deficiente. Si bien los actantes de estas situaciones somos todos, el estado es el responsable de prevenir este tipo de acciones, ya que genera un desequilibrio social y miles de violaciones a los derechos humanos, entre otros. 

 La sociedad debe ser educada, al punto de reivindicar sus valores como tal, es necesario más atención y soluciones a la causa. A pesar de las desigualdades económica y social, en distintas áreas del país, es necesario atender estas cuestiones haciendo foco en la posición social de cada comunidad afectada. 

También considero que se debe cubrir la urgente necesidad de educar y re educar a los miembros de nuestras comunidades, aplicando el nivel necesario para cada caso. Corrigiendo desde la base, que son las principales aceptaciones que tenemos de la vida, que lo es desde el sentido cultural, ético y moral.  

En distintos lugares del mundo esta problemática ha sido erradicada o cerca de serlo, tiene que ver con la participación de los responsables a cargo de velar por el bien estar común de los habitantes de un determinado territorio. 

Si bien, hoy en día existen múltiples líneas y mecanismos de apoyo no son suficientes para disminuir esta problemática en el país. 

Los países son más prósperos y pacíficos cuando sus mujeres pueden ejercer sus derechos y oportunidades en igualdad con los hombres, estima un estudio global elaborado por el Instituto Georgetown para las Mujeres, la Paz y la Seguridad de Estados Unidos. Sin embargo la pandemia de COVID-19 agudizó los conflictos y magnificó las desigualdades de género previamente existentes.

Una investigación, que analizó 170 países del mundo, ubica a Haití en la posición 142, superado en situaciones de desventaja para las mujeres por Irak, Palestina, Sudán del Sur, Siria y la India, entre otros países, con Afganistán en el peor sitio de todo el índice internacional.

Además, el centro de investigación registra a Guatemala como el segundo país con mayor vulnerabilidad para sus mujeres del espectro latinoamericano, en la posición 115, seguido de Honduras, localizado en el puesto 104. En el listado figura también Colombia, en la posición 90, donde, de acuerdo con el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), han sido asesinadas o desaparecidas tres mujeres firmantes de los acuerdos de paz y al menos 20 defensoras de derechos humanos en lo que va del 2021.

Y México, atravesado por una crisis de seguridad y homicidios dolosos al menos desde 2006, cuando Felipe Calderón tomó posesión de la presidencia de la república y desató la llamada guerra contra el narcotráfico, ocupa el lugar 88 mundial y la quinta posición latinoamericana en el índice de Georgetown.

Las mujeres del mundo no sólo padecen desafíos relativos a aspectos como el laboral, sino también fenómenos más agresivos como el desplazamiento forzado, señalan la investigación, entre otros fenómenos de violencia. Perú, Panamá, Brasil, Paraguay, Venezuela, El Salvador, Nicaragua y Chile superan a México en el índice en orden ascendente hacia el país mejor evaluado del mundo en materia de derechos de las mujeres, que es Noruega.

Al país nórdico lo siguen Finlandia, Islandia, Dinamarca y Luxemburgo en condiciones de calidad de vida para sus mujeres.

Aún en la actualidad son miles las culturas que ejercen diferente tipos de violencia contra el género femenino, donde opacan hasta la totalidad de sus derechos como personas. Un ejemplo claro de ello lo son las mujeres de Afganistán; las cuales tienen absurdas y violentas leyes que seguir, las siguientes son: 

  • Las mujeres no deben aparecer en las calles sin un pariente de sangre y sin burla.
  • Las mujeres no deben usar zapatos de tacón alto ya que ningún hombre debe escuchar los pasos de una mujer para no excitarlo.
  • Las mujeres no deben hablar en voz alta en público, ya que ningún extraño debe escuchar la voz de una mujer.
  • Todas las ventanas residenciales de la planta baja y del primer piso deben pintarse o protegerse para evitar que las mujeres sean visibles desde la calle.
  • Se prohibió fotografiar o filmar a mujeres, así como exhibir imágenes de mujeres en periódicos, libros, tiendas o en el hogar.
  • La modificación de cualquier nombre de lugar que incluya la palabra «mujer». Por ejemplo, jardín de mujeres pasó a llamarse jardín de primavera.  Las mujeres tenían prohibido aparecer en los balcones de sus apartamentos o casas.
  • Prohibición de la presencia de mujeres en la radio, la televisión o en reuniones públicas de cualquier tipo.

Las decisiones de los talibanes con respecto a la conducta pública impusieron severas restricciones a la libertad de movimiento de una mujer y crearon dificultades para quienes no podían pagar un burka o no tenían ningún mahram. Estas mujeres enfrentaron arresto domiciliario virtual. Una mujer que fue golpeada por los talibanes por caminar sola por las calles dijo «mi padre murió en la batalla… No tengo esposo, ni hermano, ni hijo. ¿Cómo voy a vivir si no puedo salir sola?

La lucha por el reconocimiento de nuestros derechos ha prevalecido y vencido en reiteradas ocasiones a lo largo de la historia a nivel nacional e internacional. Sin embargo en nuestro país y otros lugares del mundo, aún continúan los agravios contra este género, llegando hasta concretar el asesinato de algunas víctimas. Aquellas que fueron registradas, claro está, entre otras tantas que no salieron a la luz. Asesinos que no cumplen más que un castigo leve del que luego se libran y re toman su vida. 

 

Un informe elaborado por MuMaLá sobre los hechos ocurridos entre el 1 de enero y el 30 de agosto de este año, señala que en 85 casos de los 142 registrados, el femicida era la pareja o expareja de la víctima, mientras que en 24 casos el asesinoseveras restricciones a la libertad de movimiento de una mujer y crearon dificultades para quienes no podían pagar un burka o no tenían ningún mahram. Estas mujeres enfrentaron arresto domiciliario virtual. Una mujer que fue golpeada por los talibanes por caminar sola por las calles dijo «mi padre murió en la batalla… No tengo esposo, ni hermano, ni hijo. ¿Cómo voy a vivir si no puedo salir sola?

En 2010 Una niña afgana llamada Bibi Aisha fue prometida a una nueva familia a través de un método tribal para resolver disputas conocido como baad. Cuando ella huyó de la violencia que las niñas a menudo sufren bajo este método, su nueva familia la encontró, y un comandante talibán ordenó que la castigaran como ejemplo, «para que otras chicas de la aldea no intenten hacer lo mismo». Le cortaron las orejas y la nariz y la dejaron, supuestamente muerta en las montañas, pero logró sobrevivir.

Y así son miles los hechos de violación a los derechos de la mujer que se registran alrededor del mundo. Cada día mueren miles de niñas, adolescentes, y mujeres solo por el hecho serlo. 

La lucha por el reconocimiento de nuestros derechos ha prevalecido y vencido en reiteradas ocasiones a lo largo de la historia a nivel nacional e internacional. Sin embargo en nuestro país y otros lugares del mundo, aún continúan los agravios contra este género, llegando hasta concretar el asesinato de algunas víctimas. Aquellas que fueron registradas, claro está, entre otras tantas que no salieron a la luz. Asesinos que no cumplen más que un castigo leve del que luego se libran y re toman su vida. 

Señalaron también, que se registraron 11 casos de suicidios femicida, en los cuales se registraron antecedentes, denuncias y relatos de familiares, respecto de la violencia de género padecida por la víctima.

Como consecuencia de los crímenes 151 niños, niñas y adolescentes quedaron sin madre.

Según los datos registrados por MuMaLá, el 24 por ciento de mujeres víctimas de Femicidio había denunciado a su agresor previamente, mientras que el 15 por ciento tenía orden de restricción de contacto o perimetral y el 2 por ciento botón antipático.

 

 La violencia de género es una realidad. Debemos atajar esta deriva monitorizando las percepciones de los jóvenes y mostrar las tendencias para concienciar y sensibilizar, yendo a la raíz en la que muchas veces está el problema: el concepto de feminidad y de masculinidad. 

 

Bibliografía consultada:

 

file:///C:/Users/iani/Downloads/violencia_de_genero_2021_finaldigital.

pdf

 

https://www.ellitoral.com/index.php/id_um/325763-los-cinco-paisesmas-peligrosos-de-america-latina-para-las-mujeres-violencia-degenero-internacionales-violencia-de-genero.html

 

https://www.lanacion.com.ar/el-mundo/como-es-la-nueva-vida-de-lajoven-afgana-mutilada-que-conmociono-al-mundo-nid1475127/

 

https://www.ellitoral.com/index.php/id_um/325763-los-cinco-paisesmas-peligrosos-de-america-latina-para-las-mujeres-violencia-degenero-internacionales-violencia-de-genero.html